Se dice que el Times Square en New York, es en donde se concentra a diario gente de todo el mundo, pero lo que está sucediendo desde hace unos meses es que no solo es la gente, sino que el mundo en sí se instaló en Manhattan para poder apreciarlo, conocerlo y admirarlo muy de cerca y sin tener que salir del país, literalmente al alcance de nuestras manos, un mundo en miniatura y se llama Gulliver’s Gate.
Esta es la nueva atracción en New York, a unos pasos del Times Square, así que si estás de paso o por unos dias solo o con la familia, aquí tienes una nueva opción de lo que puedes hacer durante tu visita a esta hermosa ciudad.
Gulliver’s Gate estuvo en nuestra “lista de lugares para visitar” desde su apertura, queríamos ver de cerca el trabajo culminado de lo que comenzó a construirse por algo más de dos años, la construcción de este fascinante mundo en miniatura es el trabajo de artistas, diseñadores, programadores, ingenieros, electricistas y equipos de trabajo que tuvieron a su cargo específicas locaciones para construir cada detalle de las ciudades. Por ejemplo, la sección de Latin América se construyó en Argentina y lo hicieron en algo más de seis meses. Cada equipo de trabajo tuvo que viajar a la locación de Gulliver’s Gate en New York para darle a sus trabajos el toque final y que todo se vea tal y como lo diseñaron y construyeron.
Gulliver’s Gate, la experiencia
Al ingresar a Gulliver’s Gate nos dieron unas llaves muy bonitas, que a la vez te queda como souvenir y que se utilizan para activar el movimiento de ciertas piezas de las ciudades, esto les pareció muy divertido a mis hijos quienes no perdieron la oportunidad de usar la llave cada vez que podían hacerlo.
Nuestro primer ¡wow! fué cuando vimos las Cataratas del Niágara, nos quedamos ahi cerca de 10 minutos, se ve tan real, además que puedes tomarte fotos que luego se proyectan en la caida de agua de las cataratas, eso a mis hijos les pareció super cool!
Inmediatamente comenzamos nuestra visita por el mundo visitando New York, Europa, Asia, Rusia, el Medio Oriente, y no podíamos esperar a ver South America.
Durante el recorrido, no dejaban de asombrarnos los detalles, por ejemplo en el Polo Norte cuando vimos a Santa cruzando el cielo con su trineo, la circulación de los autos, buses, barcos y trenes, todo bien calculado y programado.
La sala de control es abierta y pudimos ver a los especialistas monitoreando la seguridad del lugar, asi como todo el sistema del software que permite dar movimiento a las piezas, si hay algún error ellos están ahí para arreglarlo al momento. Además que están dispuestos a responder a las preguntas de los visitantes.
Algo que nos llamó mucho la atencion tambien fue el 3D body scanner que utiliza 128 cámaras simultáneamente para tomar una foto de cuerpo entero, pero este si es de cuerpo entero, adelante, atrás y los lados. Se puede optar por mandar a hacer una figura en miniatura por un pago extra que no es nada barato, pero la foto en si es gratis y nosotros no dejamos pasar esa oportunidad de tomarnos esas fotos para el recuerdo.
La visita no duró más de dos horas, vimos Machu Picchu (un poco escondido pero lo vimos), las líneas de Nazca y México, nos encantó Asia y Rusia.
Si quieres conocer el mundo sin salir de New York, este lugar es una buena oportunidad de hacerlo. No son piezas de juguete con los que los niños chiquitos puedan jugar, es sobretodo el ver y admirar. Como lo dije antes, la parte interactiva es mediante las llaves, ten en consideración eso sí tienes en mente llevar a niños pequeños. Te sugiero que compres los tickets en línea en donde puedes obtener un porcentaje de descuento.
Leave a Reply